Me ha gustado, la he copiado y la comparto:
Os voy a contar una historia:
Erase una vez,
un país que había pasado por muchas penurias, una guerra civil, hambre, miseria… Durante muchos años hubo una dictadura que redujo las libertades, sobre todo las políticas. Pero la dictadura llegó a su fin y hubo una explosión de libertad…, llegó la democracia. Los diferentes pueblos que lo formaban creyeron en un futuro en común, respetándose los unos a los otros y empezaron un nuevo camino que les llevó juntos al progreso y al bienestar.
Pero llegó un día que esos pueblos empezaron a perderse el respeto… y en vez de un país orgulloso de todas sus singularidades y riquezas culturales, aparecieron aquellos que creían que todos tenían que ser iguales… A algunos de esos pueblos ya les parecía bien, pues realmente nunca antes se habían sentido demasiado singulares. Pero hubo otros cuya personalidad era tan marcada que de ninguna de las maneras aceptarían volver atrás.
Durante mucho tiempo el ruido mediático fue infernal, hubo boicots de productos de los pueblos hermanos, hasta se prefirió que fueran compañías extranjeras, antes que la de un pueblo hermano, las que compraran importantes empresas energéticas del país...
El ambiente era tenso, muy tenso… Ya se habían recortado algunos de los logros conseguidos con el esfuerzo de tantos años… y estaban a punto de atreverse con su lengua…
Paralelamente había habido, gracias a la bonanza económica, una importante ola de inmigración, formada por culturas muy dispares, que habían ayudado al progreso del país.
Los inmigrantes se habían instalado por todas partes, en los lugares más recónditos del territorio. La mayoría sin perder sus raíces pero sin hacer ruido. Pero de pronto, ocurrió algo que nadie antes se habría imaginado. Algunos de estos inmigrantes, muy pocos, empezaron a querer imponer sus reglas, sus religiones, sus atuendos, su música, sus tradiciones, su lengua… Poco a poco su presencia se hizo más notoria y empezaron a perder el respeto por el país que les había acogido…
Entonces fueron los del propio país, los que asustados empezaron a debatir sobre lo que podría pasar y lo que debían hacer...
Unos pocos los veían como una gran amenaza, no les parecía bien que vistieran distinto, que olieran distinto, que comieran distinto, que tuvieran otras creencias, otras lenguas… Pensaban que tendrían que defenderse si no querían ser “engullidos”…
Otros, la mayoría, los miraban con preocupación, pero creían que podrían convivir en paz, lo deseaban...
Y dentro de esa mayoría, hubo algunos a los que eso les hizo reflexionar sobre cómo ellos estaban actuando. Cayeron en la cuenta que ellos estaban haciendo lo mismo con sus pueblos hermanos, les habían perdido el respeto y pretendían imponer su uniformidad.
Entonces,
"Los que querían convivir en paz eran la mayoría y se hicieron escuchar…"
Esa mayoría entendió que se enriquecería con todas las culturas, creencias y lenguas que convivían
en ese país…
Los nuevos pueblos fueron incorporándose y enriqueciendo el país aún más….
Es sin duda una bonita historia...o un bonito sueño...
El 28 de agosto de 1963, Martin Luther King, Jr decía así:
(....)Ahora es tiempo de hacer que las promesas de democracia sean reales(...)Y mientras caminamos, debemos hacer la solemne promesa de que siempre caminaremos hacia adelante. No podemos volver atrás.(...)Suene la libertad. Y cuando esto ocurra y cuando permitamos que la libertad suene, cuando la dejemos sonar desde cada pueblo y cada aldea, desde cada estado y cada ciudad, podremos acelerar la llegada de aquel día en el que todos los hijos de Dios, hombres blancos y hombres negros, judíos y gentiles, protestantes y católicos, serán capaces de juntar las manos(...)
Parece que el sr. Martin Luther King, después de casi 50 años sigue soñando....
